Virgen de la Expectación
La representación de la Virgen en la espera del parto ha tomado los nombres de Nuestra Señora de la Expectación, de la Esperanza, “la Preñada” o de la “O”.
La iconografía del embarazo de la Virgen fue muy representada sobre todo en la España tardomedieval, en ocasiones formando grupo con su prima Isabel; pero no es tan habitual encontrarse con imágenes en las que el embarazo se hace tan explícito, al aparecer en el seno materno la figura del Niño Jesús en el interior de una cavidad de formato ovalado y realzada por una orla refulgente.
La técnica empleada en esta talla, fechada en el segundo tercio del siglo XVIII, presenta una correcta ejecución con policromías propias del repertorio barroco. Actualmente, la obra sigue expuesta al culto en su retablo, contrariamente a lo que ocurrió en otros muchos lugares, especialmente a lo largo del siglo XIX, en las que se retiraron por lo explícito de su contenido.