Alegoría de la Fe
La presente imagen de la Fe responde a una tipología habitual en muchos cementerios de la época, que toma la apariencia de una mujer joven, de expresión serena e introspectiva, con los ojos vendados, ya que la Fe es ciega. La escultura de Benlliure exhibe a la vez entre las manos, solemnemente y con devota unción, uno de los símbolos de su identidad iconográfica: un cáliz con la Sagrada Forma encima en alusión directa a la Eucaristía.
La figura viste amplios ropajes de abolengo clásico, con plegados de gran efecto plástico y claroscurista, que se contraponen al terso modelado de su rostro y manos. Estamos, pues, ante una visión de la Virtud teologal de la Fe, expresada conforme a una estética clasicista, a través de una idealizada figura femenina, a la que se ha dotado de un marcado simbolismo.