Virgen de la Majestad
Inspirada en modelos bizantinos, representa a la Virgen con Jesús sentado en su regazo, mostrando la maternidad divina de María, a la vez que sirve de trono desde donde el Hijo de Dios bendice a la Humanidad.
La oquedad existente en la parte posterior indica que fue concebida como imagen relicario. Allí, en la década de 1930, apareció un fragmento de tela y durante las labores de restauración llevadas a cabo entre abril y septiembre de 1988, fueron extraídos tres paquetes identificados como “De ligno Domine” y “De lacte de Sancte Marie”.
Realizada a principios del siglo XII, es en el siglo XIII cuando, con el fin de enriquecerla, fue recubierta, exceptuando las carnaciones, de una plancha de plata. Las manos de la Virgen y el rostro del Niño fueron rehechos en el siglo XVI.